Morales, celebró la vocación de integrar y regionalizar, apostando al potencial de cada provincia, convencido de que «los problemas estructurales del país se resolverán desde la periferia hacia el centro».

Asimismo, planteó la necesidad de «superar las restricciones del gobierno nacional para favorecer a los emprendedores que dan vida a las economías regionales» que deben ser «motor de crecimiento del país, generando más producción y trabajo».

Estimó que «no es muy complicado» y apuntó que «hay que trazar una hoja de ruta de cada actividad económica de cada provincia».

Valdés, por su parte, hizo referencia al desafío de «unirnos, sino las rutas conducen a Buenos Aires» y aseguró que esto «es realizable cuando hay voluntad política y eso es precisamente lo que venimos a expresar».

Scarpin, en tanto, ponderó la importancia del convenio para el futuro y el desarrollo de su ciudad, destacando que «Jujuy y Corrientes eran de las provincias más postergadas, en cambio hoy, de la mano de Morales y Valdés, iniciaron un proceso de transformación y crecimiento histórico», que merece ser considerado un espejo para el resto del país.